Luego del éxito de los servicios de bicicleta compartida no tardaron en presentarse los de scooters, o como les decíamos en la era precámbrica, “patines del diablo” eléctricos en nuestra CDMX.
En este caso en particular pusimos a prueba los servicios de Lime, un servicio que en otros países inició con bicicletas, pero que llega a México con este tipo de vehículos.
Los scooters se diferencian en gran manera de los de la competencia debido a que son más grandes y sólidos -no parecen “de juguete”- además de que tienen un color verde característico. Cuentan con dos controles, uno para acelerar (del lado derecho) y otro para frenar (del izquierdo) aunque también cuenta con el clásico pedal para bloquear la llanta trasera.
Cuentan con un motor de 250 Watts, ruedas de 8 pulgadas y una luz automática para efectos de visibilidad por parte de otros vehículos.
Para desbloquearlos es necesario tener la app la cual fue un tanto difícil manejar (la versión para Android) ya que en un principio no permitía agregar una tarjeta de débito; fue hasta que utilicé una de crédito que me lo permitió.
De la misma forma algunas funciones, como la de invitar a un amigo (y obtener un descuento de $60 pesos), no parecen trabajar muy bien además de que la ubicación de los scooters tarda un poco en aparecer.
El primer desbloqueó también fue un poco tardado pero una vez que lo logramos, valió la pena el esfuerzo.
Los scooters son muy rápidos, alcanzan los 24 kilómetros por hora, y si se requiere cierta prudencia para no acabar en el piso, pero una vez que se le “agarra el modo” es hasta natural la forma de manejarlos pero también, muy divertida.
El precio es algo alto, un Euro por desbloquearlo y 15 centavos de éste por minuto; bastante más caro que los $15 pesos que cuesta una MoBike por 20 minutos, por lo que es mejor utilizarlo en distancias cortas, eso sí, sin salirse de la zona de permitida ya que la multa por dejarlo fuera de ésta es de $500 pesos.
Sin lugar a dudas una forma rápida y muy sencilla de recorrer las calles. Una opción que, esperemos, baje un poco sus precios.
Recarga y gana dinero.
Una de las cosas que llaman la atención es que Lime también ofrece remuneración económica a particulares que carguen los equipos. La idea es que se puede utilizar un vehículo para recoger los scooters descargados, llevarlos a casa y ahí conectarlos a la electricidad. Para conocer los detalles hay que registrarse en la página.
Este es el sitio de Lime con acceso a la descarga de la app tanto en Android como en IOs.