La semana pasada tuve el primer acercamiento con el nuevo juguete de Apple, el iPad y pude estar una media hora con el equipo por lo que intentaré dar una idea sobre su look an feel.
Tal vez lo más genial del equipo es que uno, sin haberlo tocado nunca, sabe como usarlo. Cualquiera que haya tenido en sus manos un iPhone sabe como se prende y como funciona sin necesidad de aprender o de que le sea explicado. Esa sensación de de «dominio» del equipo hace que el primer acercamiento resulte muy familiar.
El sistema operativo es igualito al del iPhone, los íconos se acomodan de la misma manera y la navegación a través de éstos es la misma. En las manos el iPad se siente un poco pesado pero también da esa sensación de solidez de todos los equipos de Apple, da la impresión de que es de una sola pieza.
El que utilizamos (gracias, Juan Carlos) estaba elegantemente envuelto en una funda (también comprada en Apple) de imitación gamuza de color negro con un enorme logo de Apple.
Lo primero que llama la atención a la hora de encenderlo es la resolución de la pantalla que es muy atractiva y brillante (1024 por 768 pixeles en 9 pulgadas) sin embargo lo que lo gana a uno es la comodidad de su uso:
Cualquiera que se haya colocado una laptop o una netbook en las piernas sabrá que una computadora normal no está diseñada para eso. El iPad si. La sensación que da es de comodidad ya que no pesa gran cosa y su manejo es sencillo con los dedos por lo que parece hasta natural colocarla en esa posición.
Lo puede uno acercar a la cara o dejarlo a manera de descanso en el regazo sin ningún problema; creo que su gran ventaja es que está diseñado para «leer» y es muy cómodo para ésto, cosa contraria a lo que ocurre con otros equipos que son engorrosos de manejar y difíciles de usar si no están colocados sobre una mesa.
Sin embargo esa comodidad a la hora de tenerla en las manos se pierde de manera absoluta cuando queremos operarla sobre una superficie plana; uno se encuentra buscando la forma de colocarla de forma inclinada con algo que sirvade soporte. Apple ya tiene a la venta una serie de bases de este tipo (creo que un simple atril tradicional puede cubrir esta necesidad) pero creo que con estas pierde mucho su portabilidad que , a fin de cuentas, es su mejor característica.
La utilidad para leer libros es genial (se los dice un lector empedernido que ahora usa un iPhone como principal medio de lectura) tiene un funcionamiento sencillo, la letra es grande, clara y el manejo es muy intuitivo; una de las cosas que le criticaron al iPad es el gran espacio entre la pantalla y el borde (lo que en los cuadros se llama «marialuisa»); puedo decir (y también lo comparo con el iPhone) que esta es una cosa exageradamente práctica ya que para detener el equipo sin estar toqueteando y accionando funciones que no queremos, es del tamaño ideal.
Lo que no me gustó para nada fue el teclado; da la sensación de que los dedos se nos van a achatar y, en el caso del teclado en español, no existe un botón exclusivo para el acento o la letra «Ñ» por lo que es necesario utilizar el mismo sistema del iPhone (pulsar la letra de manera continua hasta que aparece la opción especial requerida) cosa que hace más lento la escritura.
Por supuesto que Apple ya ofrece también el teclado especial para el iPad, sin embargo (insisto) sólo sirve para quitar el factor portabilidad al equipo.
Una de las grandes críticas en torno al iPad ha sido que no tiene capacidad para conectarse con otra cosa más que con la computadora personal; carece de entradas USB así como de cámara por lo que todos los medios que se suban o se bajen tienen que pasar a fuerzas por iTunes.
En general creo que existen dos tipos de usuarios de Internet; los que consumen contenidos, que van a YouTube, leen Blogs así como periódicos y revistas en línea, revisan su correo y se meten a Facebook; por otra parte están los que realizan los contenidos: los que graban y editan video, escriben Blogs y generan podcasts.
El iPad, definitivamente, está diseñado para el primer grupo (que es el más numeroso). Es un equipo netamente pensado en la persona que llega a la red para buscar información o entretenimiento y que sus necesidades de interactividad no van más allá del correo electrónico o de Facebook.
En general creo que es un equipo sumamente atractivo, con una capacidad muy grande para transformarse en un navegador de Internet, en el vehículo para publicaciones electrónicas (libros y revistas) así como en una consola.
Mas que «desplazar» a otro tipo de equipos (como laptops y netbooks) veo al iPad creando su propio nicho y desarrollando, a partir de éste, toda una nueva manera de acceder a Internet y de consumir medios.